Antes de que tuviera un contacto tan directo con un niño, pensé que todos los bebés nacían con una mágica capacidad de agarrarse los pies y acercárselos hasta la boca para chupar plácidamente sus deditos.
Pero cuando nació Alexiel me di cuenta de que ese era un mito, que es imposible que se toquen los pies y se hagan bolita con tal facilidad. El caso es que de recién nacido, Alexiel nunca lo hizo... entonces yo pensé que el pobre niño habpia heredado mi capacidad para no poder maniobrar cómodamente las extensas partes de mi cuerpecito (jajaja).
Pero ahora que Alexiel ha cumplido cinco meses (y que por cierto lleva ya casi cuatro semanas que comenzó a comer sólidos) veo que es una cuestión de edad, o de desarrollo.
El caso es que Alexiel ya se alcanza los pies y hasta juega a sosternerlos (o alguno de ellos) y dejarlos caer sobre algo que haga ruido, además de que ya se agarra las "patrullas" con sus "manecitas" e incluso de repente se chupa los calcetínes... pero encantado de la vida.
Quién sabe... pero por ahora creo que una buena chamba para Alexiel podría ser la de contorsionista. Debo confesar que esta nueva etapa de desarrollo me tiene maravillada.
Si no fuera por estas lindas cosas de la vida... mi "ídem" sería ligeramente gachita.
2 comentarios:
Ja!
Si es pocamadre verlos cómo se comen los deditos de los pieees!!, jeje
A Chiara no le han dado sólitos para comer!!... yo creo que la ven tan grandota que me la quieren adelgazar a la pobrecita... de todas formas yo ya le empecé a dar cereal, por que ya no duerme por la noche... de hambre!!... jiji
Abrazo
Todo a su tiempo... Cuando tenga pie de atleta, dejará de comer calcetines.
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